Humphrey Bogart, el niño que fue un pequeño lord con rizos pero sin besos

Humphrey Bogart en su niñez recibió muchas burlas por los rizitos que portaba, porque su madre solía vestirle como el pequeño Lord. En su infancia no abundaron las muestras afectivas. Un beso era un evento. Su padre era un cirujano cardiopulmonar, y su madre una existosa ilustradora, que se convirtió en directora artística de la revista 'The delineator'. Utiilizó a Humphrey para la publicidad de una comida de bebé. De su padre dice heredó su gisto por la pesca y la navegación, el pinchar a la gente y el gusto por las mujeres de fuerte carácter. Con respecto a su 'célebre' cicatriz en el labio, que dicen determinó su singular forma de hablar, hay diversas versiones de cómo se la causó. Se dice que en su infancia, pero también cuando sirvío en la marina y llevaba a un preso esposado, el cual se revolvió y le golpeó en el labio con las esposas. Bogart relató a David Niven que el médico no le dio puntos, sino que la jodió. Louise Brooks, que le conoció en 1924, estaba convencida de que su labío no condicionaba su forma de hablar, una de las más singulares que ha habido en el cine.