Gene Tierney y Oleg Cassini: las sombras de una felicidad interrumpida

Gene Tierney y el diseñador Oleg Cassini disfrutan de un risueño momento jugando a las cartas. Se habían casado en 1941, pero su relación comenzó a ensombrecerse, en 1943, a raíz del nacimiento de su primera hija, Antoinette, que nació sorda, parcialmente ciega ( con cataratas) y con cierto retardo en sus facultades cerebrales. La causa había sido la rubeola que había contraído Gene Tierney durante su embarazo en su única actuación en el 'Hollywood canteen'. Unos años después se enteraría de que una fan, enferma de rubeola, por quererconocerla y disponer de su autógrafo, había desatendido las indicaciones de permanecer en cuarentena, lo que determnó que al darle la mano la contagiara. se se especuló que este hecho inspiró Agatha Christie para su novela 'El espejo roto'. Durante los primeros años de vida e Antoinette, Howard Hughes, viejo amigo, se encargó de cubrir todos los gastos para que tuviera los mejores tratamientos médicos. Gene nunca olvidaría esa generosidad. En 1945 se separarían Oleg y ella (por el estress al que les sometía la condición de su hija). Gene mantuvo un romance con Jon Kennedy, a quien conoció mientras rodaba 'El castillo de Dragonwyck' (1946), de Joseph L Mankiewicz. Kenney rompió porque ante todo lo prioritario eran sus ambiciones políticas. Volvieron a unirse ella y Oleg, y tuvieron una hija en 1948, Christina. Pero se divorciarían en 1952. Alaño siguiente se intensificarían sus problemas de salud mental, rechazando en 'Mogambo' el papel que acabaría interpetrando Grace kelly. Un par de años después sería internada en varios sanatorios, recibiendo 27 tratamientos de electroschock, terapia contra la que sería implacablemente crítica, ya que le había destruido importantes porciones de su memoria. En 1958 fue dada de alta, tras un tratamiento que implicaba trabajar de dependienta en unos almacenes ( donde sería reconocida por un cliente,lo que derivó en que fuera titular de portadas en los periódicos). Preminger, con quien había colaborado en tres obras previas, le facilitó un retorno con 'Tempestad en Washington' (1962), aunque sería efímero, tres películas más, dado que no podía afrontar el estress. Hasta su muerte, en 1991, sólo aparecerá muy esporadicamente ( la última en 1980), en producciones televisivas.