Jennifer Jones, la pasión controvertida

Jennifer Jones leyendo la novela 'Desde que te fuiste' de Margaret Buell Wilder, que se adaptó con el mismo título al cine, dirigida la película en 1944 por John Cromwell. En ella participa Robert Walker, su primer marido, cuando aún era Philys Isley, antes de conocer al productor David Selznick, quien la auguró que se convertiría en una gran estrella, 'bautizándola' artísticamente como Jennifer Jones y casándose con ella, previo divorcio de Walker.Hay quienes cuestionan sus dotes, y bien es cierto que, en ocasiones, incurre en una exagerado histrionismo en la excelente 'Duelo al sol' (1946),de King Vidor (aunque también con secuencias rodadas por William Cameron Menzies, Josef Von Sternberg y, sobre todo, William Dieterle: nada anómalo en un producción Selznick, como bien había ocurrido con 'Lo que el viento se llevó'). Pero Jones demostró sus buenas cualidades en obras tan admirables como 'El pecado de Clunny Brown' (1946), de Ernst Lubitsch o 'Jennie' (1948), de William Dieterle, con quien trabajaría también, en la notable 'Cartas a mi amada' (1945), y de nuevo como pareja romántica de Joseph Cotten. Algún de esos mohines crispados se le podía escapar en la magnífica 'Pasión en la niebla' (1952), de King Vidor, otro relato de pasiones exacerbadas. Es el melodrama el género que más transitó, como corroboran 'Carrie' (1952), de William Wyler, 'La canción de Bernardette' (1943), por la que ganó el Oscar, 'La colina del amor' (1955) y 'Suave es la noche' (1961), las tres de Henry King, 'Corazón salvaje' (1950), de Michael Powell. o 'Estación Termini' (1953), de Vittorio Da Sica. Fue Madam Bovary en la obra dirigida en 1949 por Vincente Minelli, que no está entre sus mejores títulos y colaboró en dos obras, no especialmente remarcables, de John Huston, 'We were strangers' (1949) y 'La burla del diablo' (1953). Su última aparición, ya muy intermitente desde los 60, fue en 'El coloso en llamas' (1974), de John Guillermin e Irwin Allen.