Jean Marais, el amor por su perro Moulouk y el mono coestrella
Jean Marais encontró a su perro Moulouk, solo y abandonado, en el bosque, en los años de la segunda guerra mundial. Moulouk le siguió y se hicieron inseparables. Marais quedó tan apenado cuando murió que fue incapaz de compartirlo con nadie Un año después estaba cenando con Jean Cocteau y este le preguntó por Moulouk, y Marais (Jeannot para Jean ) confesó que estaba muerto. Cocteau le preguntó por qué no lo había compartido con él, a lo que Marais respondió que si lo hubiera hecho no hubiera podido parar de llorar y que se sentía tan triste que no quería acrecentar su aflicción. El chimpance fue compañero de reparto en 'Le gentleman de Cocody' (1965), de Christian Jacque.
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