Charles Chaplin - -El circo - Swing little girl

En 1967 Charles Chaplin compuso una nueva banda sonora para 'El circo' (1928), incluida esta bella canción para los títulos de crédito, 'Swing little girl', que él mismo cantó. Little Girl Swing high to the sky And don't ever look at the ground If you're looking for rainbows (Pequeña chica del trapecio, alto hasta el cielo, y nunca mires al suelo si estás buscando arco iris).

Robert Mitchum, entre fronteras

Robert Mitchum en una imagen promocional de 'Más allá de Río Grande' (The wonderful country, 1959), de Robert Parrish, un viaje interior, narrado con un sutil poso melancólico, de un personaje que ha perdido sus raíces y las encuentra tras sumergirse en el corazón de las tinieblas que está a ambas orillas. Fluctúa no sólo entre las físicas de México y Estados Unidos, sino entre las de las sombras de su pasado y un presente incierto, entre sentirse estadounidense y su rechazo a los 'hombres blancos'. Su identidad es la de un extraño renegado, la del que en sus entrañas late el lamento por un desarraigo. No se suele citar en las antologías del western, pero bien merece ser considerado entre los grandes de la década prodigiosa del género.

Jean Harlow y otras criaturas caninas

Eisenstein, Chaplin: Breve estancia en Hollywood, larga amistad

Serguei Eisenstein ( en medio mirando a cámara) en el barco de Charles Chaplin ( a la derecha, con los prismáticos), con otros amigos de éste. Eisenstein se trasladaría a Hollywood en mayo de 1930, tras que un directivo de la Paramount le ofreciera un contrato de seis meses cuando Eisenstein se encontraba en París. Fue con Chaplin con quien mejor conectó, estableciendo una amistad duradera (aparte, mutua admiración como cineastas: En su primera artículo en 1922, Eisenstein había escrito que le gustaban especialmente la excentricidad, las historias de detectives y Chaplin). No fue larga la estancia de Eisenstein en Hollywood, aunque le encargaran varios guiones como Sutter's gold (las desgracias de un granjero californiano cuando se descubre oro en sus tierras) y una adaptación de la obra de Theodore Dreiser, 'Una tragedia americana' (que les gustó especialmente), ya que comenzaron a asustarse, tras visionar 'La línea general', y ver con claridad sus ideas comunistas. El mayor Frank Pease le calificó como 'el mensajero del infierno en Hollywood'. Su contrato sería rescindido en octubre de 1930.

Lord Jim - Imágenes de un rodaje

Richard Brooks, Peter O'Toole y Daliah Lavi en varios momentos de rodaje de 'Lord Jim' (1964), una excepcional obra que pertenece a otro tiempo. Aquel en el que podrían conjugarse unas bellas imágenes serenas sostenidas sobre unas oscuras turbulencias. El Clasicismo dejaba entrever sus fisuras sin dejar de confiar en la potencia de unas formas armónicas que ofrecían, como contraste, una sensibilidad que parecía condenarse a la extinción. La misma que representa el personaje de Lord Jim. Una integridad, de mirada, de lenguaje, y de actitud, que se fusionaban en un estilo y en un personaje, en la mirada de ambos. Una plenitud que es a la vez desgarradura. Un relato que crea la ilusion de sentido, y a la vez deja entrever el sinsentido y el fracaso. Un logro que además afirma una imposibilidad. Afirmación y negación conviven en una paradójica relación de plenitud. ¿Quién es Lord Jim? ¿Son esos ojos azulados como el mar, pero debatiéndose en una tormenta que no tiene fin en su interior? Símbolo de vergüenza y símbolo de liberación. Traidor y héroe. Y, en medio, la vida que es tormenta, pero ¿qué sabemos de las tormentas de nuestra mente, cómo nos enfrentamos a ellas?

Jane Wyman

Ernst Lubitsch, Emil Jannings y la película perdida: The patriot

Ernst Lubitsch y Emil Jannings (que interpretaba al zar Pablo I) durante el rodaje de 'The patriot' (1928), de la que sólo se conservan algunos fragmentos, y ya se considera como perdida. Ganó el Oscar al mejor guión (Hans Kraly) de 1928-29, siendo la única obra muda nominada a mejor película ese año ( y la última). Se le añadió una banda sonora musical, y efectos de sonidos, sin contar con la aceptación de Lubtisch. Este, ya jefe de producción de la Paramount, criticaría duramente la extravagancia de los planos de multitudes en 'Capricho imperial' (1934), de Josef Von Sternberg, sin darse cuenta de que había reutilizado los de 'The patriot'. Su trailer fue encontrado en The National Film and Sound Archive, Australia, ahora ScreenSound Australia.

Plácidas pausas de rodaje: Rock Hudson, Gig Young y el titi

Rock Hudson y Gig Young cual 'titiriteros' de la danza del titi sobre la silla del director, Melvin Frank, durante el rodaje de 'Habitación para dos' (1965).

Plácidas pausas de rodaje: Paula Prentiss

Una fabulosa Paula Prentiss ante el 'campo de batalla' con los restos del 'yeso' para las fantásticas secuencias, de 'Su juego favorito' (Man's favorite sport?, 1964), de Howard Haks, en que su personaje, Abigail, junto a su amiga, enyesan el brazo del personaje de Hudson, Roger( no precisamente en la adecuada posición del susodicho, ya que al endurecerse queda al modo saludo militar), y la posterior en la que tienen que quitarselo, recurriendo como última solución drástica a una sierra mecánica, que propicia el desmayo de Roger.

Rock Hudson - Leo Fuchs

Rock Hudson, fotografiado por Leo Fuchs, desde finales de los 50 y durante los sesenta, en y fuera de rodajes.

Sólo el cielo lo sabe - Imágenes de un rodaje

Douglas Sirk, Rock Hudson, Jane Wyman, Agnes Morehead, Russell Metty (Director de fotografía), Ross Hunter ( Guionista) y Jack Davis (Director de dialogo) durante el rodaje de 'Sólo el cielo lo sabe' (All that heaven allows,1956). Los vivaces colores, como una sinfonía cromática, refulgen desde el inicio. No son más que la cautivadora envoltura que señaliza una ausencia, ya que revela cómo ese espacio de imagen impoluta esconde una siniestra entraña. Esa sensorialidad pregnante y hechizante de la representación no es más que un artero ardid para ubicar en un espacio familiar, para socavar nuestra mirada y revelar la condición emponzoñda de ese modo de vida, o de forma no ‘habitar’ lo real y verdadero. Su condición de vida de simulacro, de cristales y reflejos de conveniencias e hipocresía, de preponderancia de la imagen social y la atrofia emocional.

Gustavo Santaolalla - Borkeback mountain

Hermosísimas alas musicales esta composición de Gustavo Santaolalla para 'Brokeback mountain' (2005), de Ang Lee, que hace sentir ese forcejeo de emoción excepcional de los dos protagonistas, cómo les hace sentir que ascienden sobre su vida, cómo algún día esperan que no sean unos fugaces encuentros clandestinos durante 20 años sino 'realización' (audacia de la que sería más capaz uno), y cómo resistir a un entorno hostil que es capaz de castrar su emoción excepcional por ser entre dos hombres.

Genevieve Page, la mujer que cautivó a Sherlock Holmes

Genevieve Page, inolvidable Gabrielle Valandon en 'La vida privada de Sherlock Holmes' (1970), de Billy Wilder, protagonista de una de las despedidas lás desazonadoramente líricas del cine (también las sombrillas lloran). La actriz francesa también trabajó con René Clement en 'La hora y el día' (1963), Delmer Daves en 'Una mujer espera' (1964), Anthony Mann en 'El Cid' (1961), Luís Buñuel en 'Belle de jour' (1967), 'Marcel Carné en 'Tres habitaciones en Manhattan' (1965), John Frankenheimer en 'Grand prix' (1966), Bertrand Blier en 'Buffet frío' (1979), Robert Altman en 'Tres en un dián' (1987), Christian-Jacques en 'Fanfan el invencible' (1952) o Charles Vidor en 'Sueño de amoir' (1960).

Plácidas pausas de rodaje: Maureen O'Hara y Victor McLaglen

Pogo, el setter irlandés de Maureen O'Hara saluda a Victor McLaglen durante el rodaje de 'Lady Godiva' (1955), de Arthur Lubin.

En rodaje: Blake Edwards y Peter Sellers

Blake Edwards ríe con alguna ocurrencia de Peter Sellers durante el rodaje de 'El guateque' (The party, 1968), quizá la obra maestra de Edwards. Es dificil dilucidar con cual gag quedarse, con un Peter Sellers inenarrable en su acento, si el gag con el panel de control, dando de comer al loro (pajarito num num), contorsionándose mientras escucha cantar a la acompañante del crispado productor del peluquín, o luchando con la inundación que crea en el baño.

El nacimiento de un plano: Wilder, Lemmon y MacLaine

Billy Wilder dando unas indicaciones a Jack Lemmon y Shirley MacLaine durante el rodaje del último plano de 'El apartamento' (1960), una bella clausura que es un reinicio, en la que los gestos, las miradas, las acciones ( la simbolica de 'repartir' la baraja para alguien que hasta ahora ha subordinado su vida a cómo le repartían otros las cartas de la baraja) condensan sutilmente esa cómplice muda y transformación vital de ambos personajes. Aunque ha sido considerado como la consolidación de una amistad que no implica el cumplimiento de las expectativas amorosas de Baxter, La actitud de éste en el plano final (cuando ella sonríe y le dice que no le diga más, tras su declaración, y 'reparta' las cartas, sin declaraciones explicitas de correspondencia, aunque su sonrisa...) expone un respeto al hecho de que cicatricen las heridas de Fran, paciente, respetuoso, considerado, tierno y compañero. Son compañeros de apuesta y nueva travesía vital. Si el amor no crece aquí...

El apartamento -Imágenes de un rodaje

Billy Wider, Jack Lemmon, Shirley MacLaine, y visitantes como Gloria Swanson y Tony Curtis, en varios momentos del rodaje de 'El apartamento' (The apartment, 1960), que nos sitúa nos sitúa en el espacio de 'la ciudad empresa'. Una ciudad narrativa definida por las líneas verticales, las del ascenso en la jerarquía y la detentación de los privilegios, que condicionan y definen las relaciones de dominio y subordinación, y las tramas paralelas, las de las líneas compartimentadas en la distribución del espacio público (funciones) y del espacio privado (doblez moral, el cultivo de la hipócrita imagen pública y las actividades clandestinas). ¿Cuál es el spacio propio para el hombre con atributos (íntegro, honesto) en un espacio regido, y (des)habitado, por el hombre de la máscara, de las promesas artificiales e imposturas?

Simon Boswell - La zona oscura

Excelente banda sonora de Simon Boswell para la única obra dirigida por el gran actor Tim Roth, 'La zona oscura' (The war zone, 1999), modélico ejemplo de cómo hacer una obra descarnada, que sabe mirar de frente, en vez de tremendista, con un tema tan 'delicado' como el abuso sexual y el incesto. Además, algo poco habitual, hace creativo uso de la iluminación (tenebrista), y afinado uso de los espacios en correspondencia con las emociones ( escarpados acantilados, un bunker o falso refugio).

Ella Raines, musa fugaz del film noir